Técnicas para la orientación: La rejilla vocacional

Una herramienta muy útil para un orientador pero sobre todo para alguien susceptible de orientación es la Rejilla vocacional o de constructos personales. Es una herramienta que digamos, necesita de una supervisión del orientador, debido a que implica una profunda reflexión por parte del participante y es que como indica Padilla (2010), es buena por varios motivos:

• Facilita que el sujeto genere su propia matriz de información.
• Favorece la implicación activa del sujeto en el análisis de su situación, así como en el establecimiento de un plan de acción.
• Permite la interrelación de los procesos de diagnóstico y orientación. Se genera información relevante y significativa para el sujeto, al tiempo que promueve la intervención.
• Resulta una técnica versátil, susceptible de ser aplicada a numerosas situaciones y problemas.

Esta técnica se aplica a través de una entrevista con el orientado y se desarrolla en un proceso que consta de cuatro pasos fundamentales (Fernández Ballesteros, 1992):
 

1. Elección de los elementos a utilizar. Estos elementos pueden ser diferentes cosas, refiriéndose a personas, a situaciones, objetos...Se aconseja que sean elementos homogéneos, con el fin de que los constructos empleados puedan
pertenecer a un mismo ámbito
2. Establecimiento de los constructos relevantes para los elementos. Esta fase llega una vez seleccionados los elementos, se comenzará por tanto, el proceso de selección y definición de los constructos personales. Todos ellos basados en tríadas de elementos, debiendo la persona escoger dos que guarden relación.
3. Representación de los datos. Aprender a establecer las relaciones entre los elementos, a comentar ese por qué.
4. Análisis de la información.  En relación con el punto anterior. Se puede realizar un análisis de contenido o un análisis estadístico que va a facilitar el estudio de las relaciones entre constructos. Con el fin de conocer a qué aspecto se le da más importancia, qué relaciones de elementos tienen más enfasis.

Los elementos siempre serán diferentes según el ámbito concreto en que se aplica la rejilla y las finalidades del proceso de diagnóstico y orientación en el que esta técnica se usa. Como se ve en la tabla de forma más clara, hay dos columnas a cada lado donde se colocarían los elementos opuestos por ejemplo, en relación a  la preferencia sobre los estudios educativos y el futuro profesional, se valoran una serie de cosas como los estudios largos/estudios cortos, trabajo individual/trabajo en grupo... etc. Un sin fin de elementos que la persona considere relevantes para su futuro profesional, para su práctica.

En este ejemplo, en la columna del medio irían aquellos estudios que la persona cree que le gustarían e iría puntuando según sus afinidades, como vemos en la siguiente tabla.

Muy útil para la orientación y la toma de deciones ¿verdad?

 

Todo ello sacado del estudio de Padilla Carmona (2010) "La rejilla de constructos personales: un instrumento para el diagnóstico y la orientación"